El profesor Francisco López Muñoz, vicerrector de Investigación y Ciencia de la Universidad Camilo José Cela (UCJC) y miembro del Comité de Observación del Observatorio de Derechos Humanos de España (ODHE) y presidente del Jurado de los Premios Catalejo, ha publicado en la Revista Logos del Centro Universitario de la Guardia Civil, junto a los profesores Francisco Pérez Fernández, de la UCJC, y Heriberto Janosch, de UNIE Universidad, y el magistrado de la Audiencia Nacional Enrique López, el artículo titulado “Violencia sexual ejercida por desconocidos en Madrid y Barcelona: un análisis situacional”.
En este trabajo, se analiza, partiendo del enfoque de la teoría de la acción situacional (TAS) las sentencias judiciales emitidas en las provincias de Madrid y Barcelona en relación con agresiones sexuales, delitos que suscitan gran alarma y preocupación pública. Esta aproximación pretende mostrar cómo los ecosistemas criminales en que se cometen los delitos, en este caso las agresiones sexuales perpetradas por desconocidos, modifican sustancialmente su curso, así como las acciones del agresor y su víctima, algo que puede ser de gran utilidad como herramienta para la investigación policial y el análisis de la conducta, así como para la comprensión de eventos criminogenéticos y dinámicas criminales específicas, máxime en el ámbito de las agresiones sexuales, cuyos protagonistas -agresor y víctima- no siempre son bien evaluados, tratados y entendidos fuera de los entornos criminológicos, policiales y jurídicos.
Los resultados de este estudio confirman que las agresiones sexuales perpetradas por desconocidos presentan diferencias significativas en ambos territorios, lo que sugiere la necesidad de estrategias de prevención y respuesta adaptadas a las características criminológicas específicas de cada ciudad. En Madrid existió un mayor uso del engaño para acercarse a la víctima, una mayor frecuencia de penetración vaginal, un menor uso de armas y drogas en el momento de la agresión, y un colectivo de agresores con menos antecedentes por delitos sexuales previos. Por su parte, en Barcelona existió una mayor frecuencia de ataques sorpresa, un mayor uso de armas y drogas, y un mayor número de agresores con antecedentes penales por delitos sexuales. También se detectó una mayor frecuencia de agresiones con penetración bucal y anal, y una mayor tendencia de la víctima a resistirse, aunque con una mayor proporción de agresiones interrumpidas por factores externos.